Diario de un gato siamés

miércoles, septiembre 29, 2004

Aprovechando que tengo una pesadilla...

- Tutu, Tutu! Tengo miedo!
- ¿Qué pasa Simba?
- Me acaba de suceder una cosa que me ha dado mucho miedo.
- Pero Simba, si estabas durmiendo, desde aquí arriba -señaló Tutu con la cabeza la cama- te acabo de ver soñar. Supongo que tendrías una pesadilla.
- ¿Una pesadilla? ¿Qué es eso, Tutu? ¿Es malo? ¿Es como eso que dicen... las pulgas? ¿Se puede comer?...
- No Simba. Son cosas que pasan en tu cabeza, al igual que en la mía. Es algo imaginario.
- ¿Imaginario? ¿Eso que es Tutu? -dijo Simba, con una cara dudosa muy expresiva.
- Es algo que no es real -dijo Tutu. Una gota de sudor le caía por la frente, igual que los clásicos comics japoneses, sabiendo que tendría que dar una de sus clases magistrales.
- Ah! Vale! Haber empezado por ahí! Así que es algo que no sucede en realidad...
- Sí, Simba. Te pondré unos ejemplos. -Tutu dio unos pasos en círculo, se sopló sobre las uñas, y empezó-.
Mira, algo real soy yo, algo imaginario es el paraíso de los perros. Algo real es una sardina que huele y se puede comer. Algo imaginario es algo que no se puede tocar, ni comer y que por suspuesto, no huele, como por ejemplo, las sardinas en lata. Son imaginarias porque no se puede abrir la lata donde están y la lata, tampoco huele a sardina. Algo real es El Jefe, algo imaginario es tu sueño o pesadilla.
- Pero Tutu... Yo he visto eso con mis propios ojos! y casi me ha tocado.-Dijo Simba, con algo de temor.
- Es que los sueños de los gatos son quasi reales, pero no lo son. ¿Sabes por qué?
- ¿Por qué Tutu?
- Porque cuando abres los ojos, lo que estabas viendo,y casi tocando... ya no está. Esa es la diferencia. Para nosotros algo real es algo que está, que se puede tocar, oler, y degustar. Algo que no esté, que no se pueda tocar, o que no huela no puede ser real.
- Pero... ¿Por qué? Las sardinas están dentro de la lata.
- Eso nunca lo sabremos, Simba. Tienes que aprender a ser desconfiado. Si por un casual abrieras la lata y vieras que hay gusanos... No estarían las sardinas. Es decir, estaríamos imaginando que hay sardinas, cuando en realidad no las hay. Tienes que tener esto presente, durante todas tus vidas. -Tutu notaba que su ego ascendía. Estaba orgulloso, de lo que sabía, y de lo bien que lo explicaba. se estaba autoconvenciendo. Él era el Maestro, y Simba, el Discípulo-.
Mira, Simba. Tu has visto esas sabrosas palomas cuando vuelan, ¿verdad? ¿Tú te lenzarías a por una?
- Mmm! A ver si lo he aprendido bien... Depende. A ver... están un poco lejos... -medía el sentido de la pregunta- pero quizá huelen... Bien. Si las huelo sí, porque sé que están allí. Si no las huelo, no, porque aunque las vea, puede ser algo imaginario.
- Muy bien -dijo Tutu-.La siguiente pregunta. ¿Si el jefe te ofrece algo con su mano, te acercarás?
- No! Porque puede no ser real. Si huele... sí, pero si no lo hace... No. También... se lo podría guardar y cogernos. Tocarnos, peinarnos, acariciarnos... Buacs! Mira, mira. Se me pone el pelaje de punta!
- Jajaja -gestualizó Tutu, al estilo de los viejos maestros humanos, con unos portentosos mofletes colorados, fruto de la buena vida, y del buen vino.- Muy bien, Simba, vas aprendiendo.
Recuerda. Primero tu olfato, luego tu vista, luego tu tacto, y por último tu gusto. Siempre acompañados de tu instinto de cazador y de tus útiles bigotes.

1 Comments:

  • Duende

    www.chitycarballo.com/duende

    Me encanta tutu. yo de mayor quiero ser como él (menos en lo gordito) :)

    By Anonymous Anónimo, at 10:25 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home